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viernes, 28 de marzo de 2014

¿Qué mascota elegir para el hogar, perro o gato?



Si quieres una mascota pero no sabes elegir entre un perro o un gato, lee los siguientes consejos que te harán tomar la decisión correcta.

Tus hijos quieren una mascota, tu marido dice perro, tu dices gato. ¿Cuál elegir? También puede pasarte que vivas sola y busques un amigo fiel que te haga compañía, o que nunca tuviste una mascota y piensas que sería bueno comenzar con una.

Sabes que los perros y los gatos son las mascotas preferidas en todo el mundo, y para elegir entre una u otra deberás prestar atención a ciertos indicadores que te harán llegar a la determinación correcta, entre ellos el tiempo con que cuentas y qué es lo que esperas de una mascota.

Ventajas y desventajas de tener un perro

Hay que pasearlo a diario, y no solo 5 minutos. Imagínate que llegas a casa cansada de trabajar y que te espera tu amigo peludo, todo contento, y desesperado por salir a caminar, no sólo porque desea hacer sus necesidades sino porque tiene que liberar su energía acumulada. ¿Estás dispuesta a llevarlo de paseo?

Un perro necesita que lo bañes con regularidad, le cortes las uñas y lo cepilles. Podrás hacerlo tú misma o mandarlo a una peluquería canina, lo cual infiere un costo.

Un perro necesita jugar, él te esperó todo el día con ansias, y no se va a conformar con una caricia.

Si sueles salir de vacaciones o viajes de negocio sería una dificultad, pues necesita de alguien que lo cuide, o de lo contrario, deberás pagar una suma abultada para que una una guardería canina se haga cargo de él.

Excremento y alimento. Son dos cosas que se relacionan, y cuando más grande es el perro, más alimento necesita y más excremento tendrás, a comparación de los gatos, que son pequeños y que aprenden fácilmente a utilizar su arena para las deposiciones.

Para tener un perro necesitas algo de espacio en casa, aunque depende del tamaño del perro.

Todo lo anterior parece que trae muchos inconvenientes, pero un perro va a sumar amor a tu vida, más del que imaginas:
  • Si te gusta hacer ejercicio, a él le encantará acompañarte.
  • Si te gusta ir de viaje en auto, él estará feliz a tu lado.
  • A los perros les encanta pasar jornadas al aire libre con la familia.
  • En su afán de complacerte aprenderá comandos y órdenes sencillas.
  • Son buenos para vigilar y cuidar tu hogar.
  • Un perro es un compañero fiel y es muy dependiente de su amo.

Ventajas y desventajas de tener un gato

Los gatos no son buenos ni para cuidar el hogar ni para complacerte aprendiendo trucos. Si aprende uno es porque le dieron ganas, no por ti.

Los gatos requieren cuidados periódicos de cepillado y corte de uñas.

No lo tienes que sacar a pasear todo el tiempo para que haga sus necesidades afuera, pero deberás limpiar su caja de arena todos los días.

El gato es una mascota independiente, si viajas, solo necesita que alguien le ponga comida y chequee que esté todo bien.

No tiene necesidad de agradarte. Si quiere que lo acaricien, irá por ti, pero no lo hará para hacerte feliz.

Cuando llegues a casa no se te va a tirar encima, pero sí le va a gustar sentarse en tu regazo a dormitar mientras miras tele.

Los gatos necesitan tiempo de juego pero no tan exigente como los perros.

Los gatos odian los autos y no son buenos para ir de paseo y excursión familiar.

Si alquilas un departamento, generalmente aceptan gatos y no perros.



Las mejores razas de gatos para niños



Elegir un gato tolerante, que no le molesten los ruidos y que le guste jugar es fundamental si tienes hijos pequeños. Encuentra aquí el listado de las mejores razas de gatos para niños con todos los consejos que necesitas para que tu elección sea la más acertada para la familia.

Los gatos y los niños son una combinación perfecta. Se considera que un gato es la mejor primer mascota que un niño pueda tener, pues es de bajo mantenimiento, no necesita que se lo saque a pasear a diario y no requiere baños con frecuencia.

Características de los gatos perfectos para niños
  • Tolera ruidos fuertes y gritos.
  • Aguanta movimientos repentinos.
  • Le gusta ser manipulado.
  • No es propenso a arañar.
  • Es sociable y adaptable.
  • Le gusta jugar.
  • Es buen compañero.
  • No es posesivo.
Principales razas para niños

Abisinio: Es una alegre y amable raza que ama jugar. Le encanta divertirse en el césped y hacer payasadas.

American Shorthair: Son gatos enérgicos y alegres, y además se llevan bien con los perros. Lo mejor de todo es que pueden jugar con los niños durante horas.

Birmanos: El gato birmano es amable y relajado. Su gran nivel de tranquilidad lo compensa con ser sumamente amigable. Es ideal para niños más grandes o tranquilos, que gusten de acicalar y mimar a su gato.

Manx: Si lo que a tu hijo le encanta es tirarle de la cola a las mascotas, ésta es tu oportunidad, ya que los gatos manx no tienen cola. Además, son sumamente sociables, afectuosos y juguetones.

Maine Coon: Aunque necesitan algo de cuidado (cepillado diario) son perfectos para los niños. Son muy leales con la familia y les gusta el agua y jugar al aire libre.

Persa: Es un excelente gato para vivir en apartamento, aunque requiere de algo de atención. Es un gato tranquilo al que le encantan los mimos.

Ragdoll: Es un gato de pelo largo que no necesita de tantos cuidados. Es un ejemplar algo inactivo, pero que seguirá a los niños por toda la casa. Es ideal para acariciar mientras se mira televisión. ¡Es muy cariñoso!

Siamés: El siamés es una raza de gatos muy popular, excelente para vivir en familia. Es curioso y le gusta mucho jugar.

Gato de refugio: Si deseas adoptar a un gato sin hogar para que se convierta en el mejor amigo de tus hijos no necesariamente tiene que ser de raza. Puedes buscar un gato adulto de raza mixta, aquel que se acerque confiado y que se muestre cariñoso. Aquel que sea tímido o que no se acerque a tus hijos no será el indicado.

¿Qué gato prefieres como mascota en tu hogar?




¿Cuándo es la época de celo de las gatas?



Si tienes una gata pequeña debes pensar en que pronto va a entrar en celo. ¿Tienes toda la información que necesitas? Encuentra aquí todo lo que tienes que saber de la época de celo de las gatas y prepárate para ese momento.
¿Cuándo comienza el celo de una gata?

El celo de una gata es el momento en el que es fértil y puede aparearse. Una gata entra en celo cuando llega a la pubertad, y eso sucede aproximadamente a los 6 meses, aunque el dato no es exacto pues varía de una raza a otra. Por ejemplo, las gatas siamesas entran en celo a los 4 o 5 meses mientras que las persas a los 10 o más.

La temporada de celo, y por lo tanto de apareamiento, es en primavera, que es cuando las horas de luz son mayores por día.

¿Cuáles son los signos de que la gata está en celo?

Los signos de que tu gata entra en celo son muy evidentes solo si sabes cuáles son. Lo que casi no sucede con las gatas es el sangrado que otras mascotas experimentan, pero sí hay otras señales a las que deberás estar atenta.

Tu gata estará más cariñosa que de costumbre, tanto con humanos como con las otras mascotas de la casa. Estará permanentemente rodeando tus piernas y frotándose en ellas, y cuando la acaricies se colocará en posición de apareamiento. Por otro lado, estará extremadamente vocal, emitiendo sonidos fuertes, diferentes a los de siempre.

La gata tal vez orine por la casa, en un esfuerzo de atraer a un macho. También tendrá ritmo agitado, lamerá su zona genital y perderá el apetito casi por completo.

Ten cuidado que con todas estas señales vienen también los intentos de escape que protagonizará, en una tentativa de conseguir aparearse.

¿Cuánto dura el celo y cada cuánto sucede?

El celo durará entre una semana y diez días, pero si la gata no quedó embarazada en ese período, se volverá a repetir cada 2 o 3 semanas durante los meses de primavera, hasta que logre embarazarse.¿Mucho tiempo no?
¿Cómo evitar el celo?

La mejor manera de evitar que la gata entre en celo es esterilizándola. Ésta es una medida socialmente responsable ya que hace que tu gatita no se reproduzca todos los años, lo que te traería el problema de ubicar a los nuevos gatitos en hogares responsables.

Para esterilizarla no hace falta ni que tenga el primer celo ni que tenga gatitos aunque sea una vez. Consulta con un veterinario para que te explique el procedimiento y su importancia. Estarás cuidándola y haciendo lo correcto.


Fuente hogartotal.imujer.com

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